lunes, 7 de mayo de 2018

ANIMALES EN EL PARQUE 05/06-05-2018. TXIRPIAL MUSEO DE BELLAS ARTES DE BILBAO

Unas hojitas de laurel para el herbario
Bajo el haya purpúrea no crece la hierba
Encontramos una cáscara de huevo de Mirlo
Nido calentito
Nido con lazo
Sin título
Con las manos en el nido
Se oye un mirlo
A la sombra del haya purpurea
Superguía
Las raíces sujetan el suelo
Me lo llevo
Del tocón cortado resurge la vida
Completamos las hojas del herbario
Nido con tejado
Un error disléxico, un niño pregunta: ¿aquí hacen yoga?, no hacen Goya

martes, 1 de mayo de 2018

TRANSITANDO POR EL BOSQUE DE LOS DUENDES




El movimiento artístico que adorna el entorno natural con hilo y lana se denomina Urban Knitting. En Herrera de Valdivielso, en  la provincia de Burgos, en el valle de Calderechas, no todo son cerezos y manzanos en flor. Te puedes emboscar en un bosque mágico en los día de niebla para transitar por el pinar. El silencio y los elfos te acompañarán.

BOSQUE AUTÓCTONO DE MUSKIZ

El municipio de Muskiz pertenece a la Región Eurosiberiana que se caracteriza por un clima templado y húmedo con frecuente precipitaciones. Al comenzar el recorrido apreciamos parte del entorno en el que nos movemos. frecuentes cultivos forestales de fondo, pinos mayormente, y eucaliptos diseminados, pastizales pertenecientes a propietarios privados y un encinar con presencia de especies asociadas a su cortejo florístico.
El abandono de las explotaciones agropecuarias en los últimos años nos permite observar la recuperación del bosque autóctono en determinados lugares. Incluso en tramos del camino por el que transitamos se muestra tapizado por jóvenes brotes verdes de robles.


Según vamos avanzando el bosque mixto recupera su espacio sobre el terreno. El roble se erige en protagonista, muy bien secundado por fresno, acebo, avellano y sauce. La floración del estrato arbustivo se muestra en vigencia: endrino, espino albar y bonetero en menor medida muestran sus mejores galas.


Alcanzamos el punto más elevado del recorrido y el amarillo inunda el paisaje en fuerte pugna con el verde de la pradera ligeramente inclinada. Los narcisos colonizan el terreno del robledal, formando pequeños islotes. Los  árboles empiezan a esbozar los primeros brotes verdes en sus ramas que vestirán su figura en futuras estaciones.

En el descenso el cerezo teje una malla simbólica de color blanco que cubre el fondo del municipio con sus casas y su refinería en el horizonte. Hombre y Naturaleza de nuevo, emboscados en la pugna por el dominio del territorio, respetando por el momento su espacio.
Un último vistazo, una mirada intencionada para observar el paisaje por el que  nos hemos movido para mostrarnos una vegetación de ligeros pastos colindante con el matorral, con pequeñas masas forestales de árboles y arbustos, donde predominan los cultivos forestales.
Pero también, con diminutos bosquetes con un significativo valor florístico: narcisos, jaras,  primeras orquídeas propias de la estación primaveral.